Con una capacidad de más de 1.050 MW, el parque eólico Western Spirit es el mayor proyecto de energía eólica construido en una sola fase en América. El proyecto, que se completó en aproximadamente un año a pesar de la pandemia de COVID-19, es un digno ganador del premio POWER Top Plant.
La Asociación Americana de Energía Limpia, un grupo que representa a empresas eólicas, solares, de transmisión y almacenamiento y sus industrias aliadas, tanto públicas como privadas, informó en su «Informe Anual de Mercado de Energía Limpia 2021» que los desarrolladores de proyectos añadieron 35.292 MW de nueva capacidad de energía a la red eléctrica en 2021. Por tercer año consecutivo, la eólica terrestre lideró las adiciones de capacidad, con un 38% del mercado. El proyecto eólico Western Spirit, de 1.051 MW en Nuevo México, encabezó la lista, con más del doble de capacidad que el siguiente mayor proyecto, el parque eólico White Mesa, de 508 MW en Texas. De hecho, Pattern Energy, promotor y propietario de Western Spirit Wind, dijo que el proyecto «representa la mayor potencia eólica jamás construida en una sola fase en América.»
Western Spirit Wind incluye cuatro emplazamientos de proyectos de energía eólica en el centro de Nuevo México: Red Cloud, Duran Mesa, Clines Corners y Tecolote. Las instalaciones combinadas utilizan un total de 377 aerogeneradores de entre 2,3 MW y 2,8 MW. Las turbinas tienen varias alturas de torre para optimizar la producción de energía. Blattner Energy fue el contratista de ingeniería, adquisición y construcción (EPC), GE Renewable Energy suministró los aerogeneradores y EC Source (una empresa de MasTec) construyó las líneas de transmisión.
«La línea de transmisión Western Spirit reescribió literalmente el panorama energético de Nuevo México, permitiéndonos construir cuatro nuevos proyectos eólicos a escala comercial en el centro y el este de Nuevo México, que constituyen el mayor proyecto eólico monofásico de toda Norteamérica», declaró el senador Martin Heinrich en la gran inauguración del proyecto en febrero de 2022. «A medida que construyamos más proyectos de infraestructura transformadora como éste, Nuevo México aumentará nuestra capacidad de exportar electrones generados de manera limpia a mercados energéticos hambrientos en estados vecinos, e importará miles de empleos bien remunerados y miles de millones de dólares de inversión privada de vuelta a nuestras comunidades.»
Debido al tamaño de los aerogeneradores, el proyecto utilizó algunas de las grúas más grandes disponibles en la región para este tipo de trabajo. Cortesía: Pattern Energy