James Crocker siente un profundo amor por Tucumcari y es rico en grandes historias.
LeDeane Studio ha sido un negocio líder en Tucumcari durante décadas; los fundadores, Leo Rorabaugh y Clara Deane hicieron un ingenioso juego de palabras con sus nombres cuando se les ocurrió ‘LeDeane’, y el estudio que fundaron ha formado parte de la historia de Tucumcari desde entonces.
En 1961, un joven James Crocker trabajó varios años en el estudio LeDeane antes de fundar un periódico.
Más tarde, en 1977, se convirtió en el segundo propietario de la tienda, que regenta desde entonces. Al ser un estudio de fotografía serio, James hace muchos de los trabajos que cabría esperar: fotos de instituto, retratos y restauración de fotos antiguas.
Su estudio también tiene un invernadero en la parte trasera que parece un plató de películas del salvaje oeste. Me dijo que es muy popular entre la gente, ya que ofrece muchas maneras de preparar tomas que acentúen los mejores rasgos de los sujetos.
A medida que profundizábamos en nuestra conversación, quedó claro que James tenía documentada gran parte de la historia de Tucumcari a través de fotografías de sus gentes y lugares.
En su salón cuelgan muestras que hizo mientras hacía retratos de personas. «En lugar de tirarlas, pensé que estaría bien conservarlas aquí. Hay muchas historias maravillosas en estas fotos», dice con una sonrisa.
Una nueva impresión de una foto restaurada por James, y el original (muy antiguo) a la derecha.
Historia antigua y nueva
Algunas de las fotos que James tiene en su estudio son de cuando era niño. Hay una gran toma de una maltería y, al oír a James contar sus recuerdos, parece como si hubiera vivido en un cuadro de Norman Rockwell.
Mientras me enseñaba varias fotos y me contaba sus historias, cada una era más interesante que la anterior, como la historia del primer vídeo que grabó.
Había un edificio en llamas y James «tenía una cámara de cine nueva, así que lo filmé», cuenta. Mientras filmaba, dijo que un buen número de mujeres salían del edificio cargadas con sus pertenencias mientras el edificio ardía hasta los cimientos.
James sabe un par de cosas sobre cámaras.
«Es el primer vídeo que grabé, y nunca he visto ese vídeo, demasiadas cosas horribles», dijo en tono sombrío antes de que pasáramos a historias más alegres y brillantes sobre las personas que ha fotografiado a lo largo de los años.
Más recientemente, fue contratado para hacer fotos de la inauguración de un nuevo puente, y en la toma se puede ver el que está sustituyendo en primer plano.
Aunque su objetivo capte la historia, James siempre tiene algo más que fotografiar en la siempre cambiante historia de Tucumcari.